martes, 12 de mayo de 2009

POR UNA EDUCACIÓN COMPLETA


A diario nos encontramos con situaciones nuevas que exploran diferentes comportamientos y reacciones, a veces conocidas o frecuentes y otras inusuales ó ajenas a nosotros. Estas situaciones ponen en crisis el concepto de lo que es “la función del docente” por ser esté el encargado de entregar el individuo a la sociedad.
Teniendo en cuenta que “el hombre no nace sino que se hace”, y en el cual participan la familia, el estado, los educadores y el resto de la sociedad; si esto es así, ¿en donde radica el problema de la falta de educación y la problemática de violencia juvenil que es más frecuente en esta época?, ¿a quién se le debe atribuir la responsabilidad de reparar este dilema, si, es una responsabilidad compartida entre la familia, administrativos de educación, gobierno y el mismo educador?.
Si a esto le sumamos la preocupación de los defensores de los derechos del menor (ICBF, UNICEF, etc.), que en su afán de darle a los menores “armas jurídicas” para protegerse de la explotación y el maltrato, promovió sin querer la rebeldía de estos menores que en algunos casos (no en todos) la manera de manipular a sus tutores ó autoridades mayores. En este orden de ideas no es raro encontrar jóvenes que causan temor a estas autoridades (padres e instituciones), pues saben y conocen de sus derechos y este conocimiento sin el direccionamiento adecuado repercute en grandes fallas de disciplina y responsabilidad de estas personas en una sociedad civil.
En un afán de controlar y direccionar íntegramente la educación, aún están en la búsqueda que más que proponer cambiar la metodología de enseñanza por algo que permita el libre desarrollo de cada individuo, es, una propuesta al mejoramiento de los contenidos y el aprendizaje de los docentes, implementando nuevas formas, planteando el mejoramiento del educando en su proceso humanístico, teológico y con un enfoque hacia un proyecto de vida.
Y si la educación esta amparada por el Gobierno Nacional… ¿no tiene lógica que en el contexto social la misma, sea privilegiada en sectores y estratos estratégicamente? Podemos darnos cuenta también que el currículo de enseñanza en un colegio estrato 2 ó 3 del Distrito no se imparte el mismo currículo de otro Colegio Privado de estrato 4,5 ó 6.
Si me lo preguntan, me atrevo a decir que la educación propone dos tipos de educación, para empleados o las masas del proletariado, y, para Pudientes ó Empresarios. En este modo se enseña lo que se conviene, no interesa provocar el despertar por el conocimiento y el progreso personal y tecnológico; igual sucede en Instituciones de Educación Superior y Universidades Privadas.
Por ahora algunos docentes continúan buscando diversas fuentes para crear procesos de mejoramiento en el proceso de instrucción a los educandos, sin embargo esto requiere más que buena voluntad por parte del cuerpo docente requiere también el interés del educando y en esto infiere más la formación que se da por parte del núcleo familiar y el entorno social donde se desarrolla el individuo.


Mónica Espitía Piramanrique

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